Wu Zetian, una concubina que cambió una tradición.

 

Wu Zetian (Wu Zhou) 624-705 d.c.

En una época dominada por varones, Wu Zetian (624-705) es recordada en los Anales de China por ser la única mujer que logró alzarse al trono, impulsar la igualdad de género, apoyar el arte y la literatura, irrumpir con una auténtica reforma agraria y expandir los dominios políticos y culturales de China a territorios como Japón y Korea, entre otras cosas, e incluso su nombre quedó para la historia en una de las Dinastías más imponentes de China, la Dinastía Zhou

De padre comerciante, vieron mejorado su estatus social al alistarse en el ejército y acercándolos al séquito imperial. Wu fue educada en la lectura y escritura (reservados normalmente para hombres), también instruida en varios instrumentos musicales, poesía y oratoria. La familia tenía fuertes conexiones políticas y de adolescente entró en el palacio imperial como concubina de 5º rango, pero al morir el emperador se convirtió a monja. Al ser coronado el siguiente emperador, Gaozong, el cual estaba enamorada de ella (incluso iba a visitarla al templo) se volvió a permitir que volviera a palacio.

Una de las concubinas de Gaozong le dio 1 hijo y 2 hijas, con lo que el emperador ya tenía descendencia y esto haría que la concubina subiera a emperatriz. La emperatriz de ese momento no podía tener hijos x lo q hizo todo lo posible para que Wu abandonara el templo donde estaba como monja y volviera a palacio para desplazar a la concubina y poder, la emperatriz, seguir en su puesto.

No funcionó, ambas fueron depuestas y Wu ascendió al estatus de Chenfei (consorte celestial). Y más adelante a emperatriz de Gaozong. Tuvo 4 hijos, 2 como concubina y dos como emperatriz.

El emperador estaba enfermo y cada vez delegaba más asuntos de Estado en Wu. Estas ausencias en el control del imperio por parte del emperador hacían que fuera perdiendo su control en favor de Wu.

Gaozong murió y el tercer hijo de Wu se proclamó emperador, pero una serie de disputas llevaron a su destitución y el siguente hijo fue nombrado.

Este último abdicó al poco tiempo y Wu fue proclamada “Emperador Santo y Divino” (título reservado a los hombres) de la nueva dinastía Zhou.

Reinó durante 15 años (690-705 d.c), durante los cuales cabe destacar:

1-      Mejoró el sistema educacional (permitiendo a las mujeres talentosas servir en la corte imperial). Su primer ministro era también una mujer.

No hay que olvidar que la mujer debía enmarcarse necesariamente en el ámbito privado y familiar, y someterse por tanto a las llamadas “tres obediencias”: como hija debía acatar las normas de su padre, como es­posa, debía respeto a su marido y, una vez anciana, debía someterse a su hijo

El objetivo primordial de una mujer era el matrimonio, y por ello su educación se basaba sim­plemente en el correcto cumplimiento de sus deberes maritales, domésticos y familiares. Su deber era mantener la tradición, dar a luz a descendientes que dieran continuación al linaje y encargarse de su correcta educación y rendir el culto apropiado a los antepasados fa­miliares

2-      Las personas elegidas para ello eran examinadas (se les hacía exámenes para “opositar” a un puesto) y posteriormente supervisadas, incluso por la propia Wu, y de esta manera eran los más capaces intelectualmente los que accedían, sin importar el status familiar, tan arraigado en la época.

Su primer ministro fue también una mujer.

3-      Creó el grupo “Intelectuales de la Puerta Norte” para promover la literatura en toda la población china, hombres y mujeres.

4-      Mejoró la economía y el comercio (abriendo nuevas rutas y expansión comercial), particularmente en la agricultura.

5-      Potenció la defensa del Budismo, más tolerante y progresista que el Confucionismo, el cual recelaba de que una mujer ascendiera al trono. No nos olvidemos de lo que significaba y el papel que tenía la religión y lo que suponía un cambio de la misma.

Sobre todo, le dio una importancia a la mujer no vista hasta la fecha, en contra de todos los preceptos confucionistas de la época, más propenso al desprecio y olvido de la mujer:

-          Con la dinastía Tang hubo más libertad de la mujer, alcanzando su cénit durante el período Wu. Una de las tareas de los “Intelectuales de la Puerta Norte” era escribir biografías de mujeres ejemplares, especialmente Wu defendía que el mejor gobernante era el que lo hace como una madre gobierna a sus hijos.

-          Se dieron varios derechos a las mujeres, como por ejemplo el tiempo de luto por la muerte de una madre se equiparó al del padre (esto elevaba la posición de la mujer a “cabeza de familia” compartida con el hombre)

-          Más importancia de las mujeres en la corte y en la diplomacia. Incluso los matrimonios a la hora de sellar alianzas eran más importantes que las de los varones.

-          Se permitió el divorcio y el 2º matrimonio tras la muerte del marido.

-          Más libertad sexual y promiscuidad.

En cualquier caso, la libertad de la mujer se vio cortada de raíz con el ascenso de la dinastía Sung al poder tras la muerte de Wu.

El Confucionismo llegó a exagerar la mayoría de los textos que describían la vida de Wu, ya que como conservadores criticaban que una mujer rompiera el balance natural del poder asumiendo un cargo que solo podía desempeñar un hombre.

Supo poner a la mujer en un lugar principal, en un periodo dominado por tradiciones, valores y cultura en los que algo así era impensable:

Religión: desplazando al Confucionismo para dar entrada al Budismo, donde la visión de la mujer era diametralmente opuesta.

Tradición y papel de la mujer en la familia y en la vida, sacándola de los roles establecidos y creando un prototipo de mujer nunca visto hasta la fecha

Poder: reservado para hombres, el cual estaba predestinado por mandato divino, celestial, a lo que ella dio un giro, incluso proclamándose emperador y no emperatriz.

Comparación con Europa: Alta edad media (Edad Oscura), donde la ignorancia, la superstición y el fanatismo religioso ensombrecían la época clásica.

Una mujer luchando contra toda una época: poder, religión, costumbre y tradición.

 

 

Fuentes:

-          Rompiendo tópicos, mujeres modernas. Universidad Carlos III

-          Web La ruta China

-          Muy historia

-          Web Centro de estudios chinos

-          Web Cultura asiática

-          Web Retratos de la historia

-          Fundación Wiese

-          Web Círculo rojo

-          Valerosas, vol 1. Penélope Bagieu